¿QUÉ SON Y DE DÓNDE PROVIENEN LAS PORCIONES DE PALOMETA?
La palometa o Brama brama se trata de un pescado capturado en el Océano Atlántico Sudeste.
También conocido como japuta, castañeta o zapatero. Es un pescado semigraso o azul y de agua salada. Pertenece a la familia de los Brámidos, dentro del orden de los Perciformes.
Vive a profundidades de entre 100 y 400 metros, aunque se puede encontrar a más de 900 metros. en invierno. En verano en la época de reproducción se acercan a la costa. Suelen vivir solos o en pequeños grupos. Su carne es muy apreciada en algunas zonas de España, sobre todo en Andalucía.
Es un feroz depredador carnívoro que se alimenta de peces pequeños, cefalópodos y diferentes animales marinos.
¿CÓMO SE PRESENTAN LAS PORCIONES DE PALOMETA?
Las porciones de Palometa se presentan en caja de 5 kilos y podemos encontrar varios tamaños:
- 80-100 gramos
- 100-120 gramos
- 120-140 gramos
- 140-160 gramos
Ultracongelado a bordo, se presentan interfoliadas, manteniendo de esta manera todas sus propiedades organolépticas.
VENTAJAS PARA EL HOSTELERO
Su contenido en proteínas es muy alto, superior al de gran parte de los pescados.
La palometa es un delicioso y versátil pescado, con una carne seca, por lo que su preparación suele ir acompañada de diversas salsas.
Su versatilidad a la hora de preparar recetas y la diversidad de tamaños disponibles hace de este producto un aliado para cumplir las necesidades del hostelero y suponiendo de esta manera una reducción de costes.
Su presentación interfoliada (entre capas de plástico) permite que el producto se conserve en perfecto estado y a su vez, facilita la descongelación unitaria.
Por 100 g Crudo:
Valor Energético (kJ): 407
Valor Energético (kcal): 96
Grasas (g): 1,8
de las cuales saturadas (g): 0,8
Hidratos de Carbono (g): 0
de los cuales azúcares (g): 0
Proteínas (g): 20
Sal (g): 0,28
Las porciones de palometa se pueden cocinar sin necesidad de descongelación previa, únicamente incrementando el tiempo de preparación de la receta.
También, se puede descongelar con las siguientes pautas:
Frigorífico: descongelar durante 12 horas en un recipiente cerrado, para evitar la contaminación con otros ingredientes, y que permita recoger el líquido que se genere. Esta sin duda, es la mejor opción.
Con agua fría: sumergir en agua fría, cambiando el agua cada 30 minutos, manteniendo el producto en la bolsa protectora para evitar que esté en contacto directo con el agua.
En el Microondas, utilizando la opción “descongelación”. En el caso de elegir este método de descongelación, se debe cocinar el producto inmediatamente después de descongelarlo, ya que algunas áreas pueden haber empezado a cocinarse.
Una vez descongelado el producto, preparar al gusto.