¿QUÉ SON Y DE DÓNDE PROVIENEN LOS PECHOS DE CANGREJO?
Chaceon es un género de cangrejos de la familia Geryonidae.
Los pechos de cangrejo se corresponden con las patas de esta especie, características por una dura cáscara dura pero una una delicada y exquisita carne que hará las delicias de los paladares más exigentes. Ideales para sumar variedad y buen gusto en una buena mariscada.
Tiene un color anaranjado con zonas marrones y su longitud máxima es de 160mm.
Se pesca en la FAO 47, situado en el sector suroriental del Océano Atlántico (Angola) con barcos tangoneros congeladores.
La época de pesca de este crustáceo se establece entre los meses de marzo a diciembre.
¿CÓMO SE PRESENTAN LOS PECHOS DE CANGREJO?
Los pechos de cangrejo se presentan crudos y ultracongelados, en caja máster de 12 kg, compuesta por 6 estuches de 2 kg.
Y se pueden encontrar en 3 tallas distintas:
- <10 piezas/kg
- 10 – 20 piezas/kg
- >20 piezas/kg
VENTAJAS PARA EL HOSTELERO
Los pechos de cangrejo son un acierto como ingrediente en tus menús.
Vienen ultracongelados, siendo fácil su descongelación unitaria, por lo que evitamos mermas de producto, suponiendo esto un ahorro significativo de costes.
Son ideales para preparar parrillas de mariscos, arroces, fumet etc su versatilidad a la hora de incluirlos en nuestro menú hace que una sola referencia podamos usarla en muchos platos diferentes de nuestro restaurante, lo cual los desperdicios y la capacidad de almacenamiento se vería reducida significativamente.
Por 100 g Crudo:
Valor Energético (kJ): 520
Valor Energético (kcal): 124
Grasas (g): 5,1
de las cuales saturadas (g): 0,7
Hidratos de Carbono (g):0
de los cuales azúcares (g): 0
Proteínas (g): 19,5
Sal (g): 0,93
INGREDIENTES:
Cangrejo, antioxidantes (E223 (sulfitos), E330), estabilizantes (E451, E452), Azúcar.
ALÉRGENOS:
Presencia de: Crustáceos y productos a base de crustáceos, dióxido de azufre y sulfitos (>10ppm de SO2).
Puede contener: Pescado y productos a base de pescado, moluscos y productos a base de moluscos.
Los pechos de cangrejo se pueden cocinar sin necesidad de descongelación previa, únicamente incrementando el tiempo de preparación de la receta.
También, se pueden descongelar con las siguientes pautas:
Frigorífico: descongelar durante 12 horas en un recipiente cerrado, para evitar la contaminación con otros ingredientes, y que permita recoger el líquido que se genere. Esta sin duda, es la mejor opción.
Con agua fría: sumergir en agua fría, cambiando el agua cada 30 minutos, manteniendo el producto en la bolsa protectora para evitar que esté en contacto directo con el agua.
En el Microondas, utilizando la opción “descongelación”. En el caso de elegir este método de descongelación, se debe cocinar el producto inmediatamente después de descongelarlo, ya que algunas áreas pueden haber empezado a cocinarse.
Ideales para elaborar a la plancha/sartén, vapor, cocción, horno, en guisos…